II.- Jesús también mira (3e4)

Sabe interpretar el tiempo presente

Por eso invita a la gente “que sabe interpretar el aspecto del cielo y de la tierra” (Lc. 12, 54-56) que juzguen ellos mismos lo que se debe hacer en el presente. Si ven los fenómenos naturales y saben discernís su significado, deberían también ver el presente y su significado. Exigen señales “pues señales no se les darán, excepto la señal de Jonás” (Mt. 16, 4). Éste predicó la penitencia a los ninivitas y estos le hicieron caso convirtiéndose. El presente está en quien es más que Jonás que pide abrir los ojos como Él y aceptar la radical novedad del Reino de Dios. Todo lo demás pasará. Desaparecerán los edificios del templo (Mc. 13, 1-2), Jerusalén será sitiada (Lc. 21, 20) y aparecerá la abominación de la desolación (Mc. 13, 14), “cuando veáis vosotros todo eso sabed también que ya está cerca” (Mt. 24, 13) “entonces brillará en el cielo la señal del Hijo del Hombre” (Mt. 24, 30). Hay que ver el tiempo presente y lo que en él se revela.